Todas nos merecemos este regalo.
El ritmo de vida que llevamos hace que la mayoria de las veces funcionemos en piloto automatico, por costumbre, sin darnos un momento para sentir si es lo que queremos en verdad.
Cada vez que actúas desde el Tener más que desde el Querer, te estás rechazando a tí misma.
Y si lo hacemos aparece nuestra niña buena y con ella la culpa y la vergüenza.
Nos han dicho que sentir placer estaba mal y era sucio.
No somos conscientes hoy de cómo algunas de estas frases pueden haber bloqueado nuestro cuerpo al Placer.
Esto está grabado en nuestros cuerpos.
El compromiso contigo es enseñarle a tu cuerpo que es un lugar seguro y que el Placer es la medicina que te sana.